Derechos de los creyentes ante sus Confesiones

DERECHOS DE LOS CREYENTES ANTE SUS CONFESIONES

Conclusiones del Foro de la plataforma de dialogo intercultural e interreligioso de Málaga de 2004

La preocupación de la sociedad es grande ante el miedo a ser manipulados en sus legítimas creencias y conciencias por grupos religiosos o sectarios en los que inicialmente confían, por lo que hay principios mínimos que deberían ser respetados por todas las religiones ó grupos de creencias. Son escrupulosamente respetuosos en las formas y contenidos con las confesiones legítimamente establecidas.
El derecho al desarrollo espiritual libre dentro de sus confesiones de todos los hombres y mujeres debe ser reconocido como uno de los derechos fundamentales de los creyentes y que se opongan o bien dificulten el desarrollo del concepto espiritual que la humanidad en su conjunto reconoce como exponente de sus mejores cualidades. Nos referimos a los principios universales más altos reconocidos de Paz, Tolerancia, Vida, Amor, Libertad y los derechos que de ellos se derivan::
Sobre la violencia y el terrorismo
Todos los seres humanos tienen el derecho espiritual a que no se aleguen motivaciones religiosas para incitar a la violencia contra otras naciones o grupos humanos. Es preciso deslindar estos actos y sus motivaciones culturales, históricas, étnicas o sociales de los conceptos espirituales y en su caso acudir a las jurisdicciones nacionales o internacionales competentes.
También tienen el derecho a que esos conceptos no sean utilizados para incitarles a cualquier tipo de autoviolencia o autoinmolación ya sea física o psíquica que pueda lesionar el desarrollo integral de sus personas o sus propias vidas.
Sobre la discriminación
Todos los seres humanos tienen el derecho espiritual a que su sistema de creencias no le discrimine por razones de edad, sexo o condición social, estando en contradicción con este derecho el mantenimiento de ciertos grupos de castas cerradas.
Todas las mujeres tienen el derecho espiritual a no ser discriminadas por razón de su sexo, ni dentro de la propia organización ni en la imagen que esta difunda de ella. Igualmente tienen el mismo derecho a que su libertad no sea reprimida en cualquiera de sus formas ni su desarrollo integral obstaculizado.

Sobre la política
Todos los seres humanos tienen el derecho espiritual a que su sistema de creencias no esté ligado al poder político, social o cultural cuando esto sea utilizado para lograr privilegios o posiciones de poder que redundan en mayor opresión, trabas para el desarrollo integral o transgresiones de los derechos humanos para ciertos grupos sociales, culturales, étnicos o de sexo diferente.
Sobre la ignorancia
Todos los seres humanos tiene el derecho espiritual a que su sistema de creencias no se apoye en la ignorancia de las personas para incitarlas a una sumisión sin dignidad. La tolerancia, el conocimiento abierto de otros sistemas y de las Leyes Universales favorecerán la consecución de su plena autonomía.
Sobre el fanatismo
Todos los seres humanos tienen el derecho espiritual a que no se fomente el fanatismo dentro de su sistema de creencias, ya que este perpetúa las cadenas de la violencia,el terrorismo, el racismo y la intolerancia. Es preciso promover el respeto hacia otras posibles concepciones de la Divinidad o del Universo en consonancia con los derechos espirituales anteriormente citados.
Sobre el temor
Todos los seres humanos tienen el derecho espiritual a que su sistema de creencias no fomente el temor inherente al género humano para tener un ascendente entre los hombres y las mujeres en su propio beneficio o en el de cualquier grupo de presión. Tienen el derecho espiritual a que se les abra una vía a la esperanza de una conciencia sobre lo Divino en libertad y en constante evolución.
Sobre las jerarquías
Todos los seres humanos tienen el derecho espiritual a que la organización jerárquica de su sistema de creencias no impongan sus propias opiniones en razón de su cargo si estas no colaboran al desarrollo espiritual e integral del hombre o no coinciden con los principios de validez universal de Vida, Paz, Tolerancia ,Amor y Libertad.
Sobre los libros sagrados
Todos los seres humanos tienen el derecho espiritual a que no se impongan interpretaciones literales o parciales de sus Libros Sagrados cuando estas se encuentren en oposición con los principios de validez universal antes citados por encima de aquellas interpretaciones que concuerdan con dichos principios.
Sobre los lugares sagrados
Todos los seres humanos tienen el derecho espiritual a la utilización de los lugares considerados Sagrados o como centros universales de plegarias y peregrinación, y a poder ser compartidos por todos los hombres o mujeres que lo deseen sin distinción de credos o razas, guardando el respeto debido a las creencias que los comparten.
Sobre la tolerancia
Todos los seres humanos tienen el derecho espiritual a que ninguna religión o creencia se atribuya en exclusiva la idea del Dios Universal. Tiene el derecho a que todas ellas sean reconocidas como manifestaciones de una Misma Idea adaptada a la cultura y a la raza en la que se ha desarrollado.
Sobre el respeto a la vida
Todos los seres humanos tiene el derecho espiritual a que su sistema de creencias proteja la vida humana y animal y no practique ningún tipo de mutilación o tortura física o psíquica. Este principio no puede ser entendido sin el concepto de equilibrio de la Vida que informa la Naturaleza. Dentro de ese marco la Vida debe ser considerada como el mayor bien a respetar y cuidar.
Sobre el libre albedrío
Todos los seres humanos tiene el derecho espiritual a que su sistema de creencias respete
en última instancia su libre albedrío sin someterles a presiones que dañen su integridad .